La mayoría de trabajadores, cuando comienzan su carrera profesional, tienen como objetivo  trabajar en una gran multinacional con un reconocido prestigio en el mercado que también dé prestigio al trabajador y pueda completar un currículum brillante. De esta forma, la persona cree que podrá conseguir mejores contratos y posiblemente lo consiga. Sin embargo, está demostrado que muchas veces no es una buena opción recalar en empresas grandes o con una trayectoria contrastada en el mercado.

Según un estudio efectuado por la multinacional británica Hays, un porcentaje importante de trabajadores presume de formar parte de una gran empresa donde, en realidad, el trabajo que desarrolla es poco o nada satisfactorio. El sentimiento de emoción de pertenecer a una marca conocida y respetada por todos tiene más importancia para la persona que el hecho de desarrollar un trabajo que le permita formarse convenientemente como profesional y labrarse una carrera bien cimentada. Y es que, en muchos casos, el excesivo brillo de la marca puede cegar a los trabajadores.

Las compañías de gran tamaño, al igual que las más pequeñas, pueden aportar beneficios de igual forma a los trabajadores. Todo dependerá de la ambición, la personalidad, las capacidades y el momento laboral de cada persona. Es muy común el hecho de menospreciar ofertas laborales de empresas pequeñas sin tener en cuenta las ventajas que les pueden ofrecer y lanzarse a la búsqueda de ofertas de multinacionales sólo por el hecho de acaparar prestigio en un corto espacio de tiempo.

Según el estudio de Hays, las grandes compañías ofrecen una serie de ventajas totalmente diferentes a las pequeñas. Por ejemplo una mayor perspectiva de movilidad, mejor formación, mejores oportunidades de networking, funciones de trabajo específicas, mejores presupuestos de inversión, mayor estabilidad y, en general, más apoyo y beneficios a todos los niveles.

Sin embargo, las pequeñas empresas son capaces de aportar otras ventajas que no tienen las grandes empresas, como por ejemplo la oportunidad de aprender más rápido, una mayor autonomía, experiencia más amplia y mayor responsabilidad, una interacción más directa con los altos cargos, una mayor fluidez en la toma de decisiones y, muchas veces, un ambiente laboral más limpio.

Por tanto, no está de más tener en cuenta las ofertas de trabajo de las empresas pequeñas, porque en muchos momentos de la vida laboral de los trabajadores, sin duda le reportará mayores beneficios que el hecho de pertenecer a una empresa multinacional donde pocas veces se personaliza el trabajo y la insatisfacción puede hacer acto de presencia más pronto que tarde.

Precisamente son las pequeñas empresas las que disponen de herramientas quizá más efectivas que las grandes empresas para gestionar mejor su actividad. El negocio de una Pyme por ejemplo, es mucho más abarcable que el de una multinacional, con la implementación de plataformas de contabilidad online como Contamoney, que ofrece un servicio de gran valor para saber en todo momento las cuentas de la entidad y además con la posibilidad de gestionar la facturación online de un modo sencillo y práctico.

El hecho de llevar un control diario del negocio supone una ventaja muy importante respecto a las empresas grandes que hacen balances más generales a final de año y pierden la perspectiva de su actividad. Gracias la contabilidad y facturación online, y a un control continuado de la actividad, el empresario puede tomar decisiones con una información actualizada y fiable para enderezar el rumbo o para mejorar aspectos del negocio. Esa es el principal valor de Contamoney. Una herramienta de ayuda para mejorar el día a día de las pequeñas empresas.

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